No tenía pensado hacer otro DIY hoy, porque ahora en verano con la peque en casa y el sol que hemos tenido estas semanas en Asturias se hace un poco cuesta arriba sacar tiempo para hacer cosas de manera relajada, y uno sólo puede pensar en las vacaciones que se acercan. Pero ayer, mientras veía la única serie que ha conseguido engancharme este verano (The bridge), cogí de nuevo las pyssla para intentar hacer la pulsera que os enseño y me entretuve tanto haciéndola que acabé haciendo tres. Así que aquí tenéis el DIY.
Es una pulsera muy, muy sencilla y los materiales no pueden ser más baratos. Yo la hice para mí, pero veréis por el tutorial que pueden hacerlas los peques un poco más mayores que Leia, yo creo que con cinco-seis años ya pueden hacerlas perfectamente y como ya os dije, entretiene un montón.
Además estas pulseras cumplen mi regla básica para las pulseras de verano: atarlas en la muñeca y olvidarte de quitarlas hasta que llega septiembre. Estas resisten playa, piscina, montaña, parques…
DIY Pulsera de la amistad con Pyssla
Los materiales que necesitas son: scoubidou y abalorios pyssla. Nombres rarísimos para decir que usé una cuerda de plástico y abalorios de plástico. Ya os hablé de las pyssla en el post de la pulsera infantil, son de Ikea y la única pega que les encuentro son que vienen solo en ocho colores. Hay otras marcas como Hama Beads y Perler que tienen más variedad.
Sin embargo este verano estoy completamente obsesionada con la combinación naranja-rosa y tuve la suerte de que esos dos tonos los tiene pyssla. Dos colores que no parecen pegar, pero que me rechiflan juntos. ¿No me creéis? Echad un vistazo a este enlace de pinterest.
En casa tenía dos tipos de scoubidou: unos opacos y más gruesos y otros transparentes mucho más finos y maleables. Lo dejo a vuestra elección: los más gruesos cuesta algo más ir enhebrándolos a la hora de hacer las pulseras, pero los abalorios quedan mejor fijados y no se deforma tanto la pulsera; los transparentes son facilísimos de enhebrar, pero tienden a torcerse y la pulsera no queda tan lisa como la otra. Yo escogí los opacos.
Cogemos el scoubidou y lo doblamos por la mitad y dejando un sobrante para después atar la pulsera, hacemos un nudo.
Y ahora la dinámica repetiréis durante toda la pulsera: 1) Enhebramos el abalorio con el primer “hilo” del scoubidou por el lado izquierdo 2) sujetamos el hilo haciendo presión por debajo del abalorio para dejar más hueco (esto en el fino os lo podéis saltar) 3) pasamos el segundo “hilo” por el lado derecho del abalorio y lo sacamos por el contrario 4) tiramos de ambos hilos 5) Importante: cuando estés llegando al lugar donde quedará el abalorio tira más despacio ajustando para que quede lo más recto posible y centrado. Esto es clave sobre todo en el primero.
Mi pulsera llevó 24 abalorios, así que hice cadenas de 6 de cada color. No me compliqué la vida para cerrarla, sino que volví a hacer un nudo y dejar algo de scoubidou para poder atarlo con el principio.
Espero que os haya gustado, y animaros a hacerla que queda muy resultona :)
